Los que nos seguís en Facebook y Twitter sabéis que estuvimos la semana pasada en Cerler.
Pasamos allí los días de Reyes y os tengo que decir que la experiencia ha sido realmente recomendable.
Os contamos nuestra crónica paso a paso:
Lo primero: el tiempo. Nuestros destinos este año (y probablemente el que viene) van a ir supeditados a la predicción meteorológica y es que este es el año en que nuestras peques de 5 y 4 años esperamos, aprendan a esquiar y sobre todo... les guste!
Por ello buscamos, lo primero, buen tiempo.
Un día con frío, con ventisca o lluvia, no conseguirá otra cosa que quitarles las ganas de esquiar. Y eso no lo podemos permitir, ¿verdad? ¡Con lo que le gusta a los papás el esquí!
Así que, en nuestra decisión del destino de Reyes lo primero fue ver que la predicción para estos días era buena.
Comprobado esto, ¿que buscábamos?
Una estación familiar pero no muy masificada.
Las colas, mucha gente en las pistas, aparcar muy lejos, esperar para comer....Todo esto hace pesado un maravilloso día de esquí y puede desanimar y desmotivar a los peques, que como ya sabéis, no se caracterizan precisamente por la paciencia. Por eso, habitualmente, pero más este año, intentaremos evitar la temporada alta y las masificaciones.
Conocíamos Cerler desde antes de esquiar con las niñas. El acceso desde Madrid y Barcelona es más complicado por el último tramo de carretera que digamos que es....incómodo y por eso no suele ir tanta gente como a otras estaciones de más fácil acceso. Además la estación es preciosa. Nos encanta! El rincón del Cielo, Gallinero, Bassibé... y el entorno: maravilloso.
Así que, a priori Cerler parecía un buen destino.
También buscábamos que hubiera algo organizado para Reyes.
Un día tan importante para los niños, que viven con tanta ilusión y que esperan ansiosamente desde que acaba el cole, tiene que ser... realmente especial. Así que en nuestra búsqueda de destino era una de las preguntas recurrentes: hacéis algo en la estación? Hay cabalgata en el pueblo?
Y en Cerler si que hacían. Hay cabalgata en Benasque y en varios de los pueblos del valle y además Aramon organizaba también la llegada de los Reyes a la propia estación, que divertido!!
Bueno, parece que Cerler cumplía todos nuestros requisitos: estación familiar, buena zona de debutantes, varias escuelas de esquí dónde organizan cursillos y Reyes tanto en la estación como en el pueblo.... Cerler allá vamos!!!!
Bueno, pues nuestra experiencia... fue maravillosa.
Días increíbles y nada de frío. Como ya habían esquiado algo en San Isidro (también os contamos en este blog nuestra experiencia) cogimos monitor y cursillo de fin de semana en Cota 2000.
Se llega con la Silla del Molino y tiene un pequeño handicap que es la bajada desde la silla a Cota 2000. Ahí, si no saben esquiar, los tienes que llevar cogidos, pero luego es muy recomendable porque tienen una pista verde de las más largas de España (y preciosa, con caminitos entre pinos) y una silla de debutantes con lo cual los peques no tienen que aprender a coger perchas desde el principio y no se aburren en seguida como ocurre cuando las pistas de debutantes son cortas.
Las niñas aprendieron un montón!!
Otra ventaja de Cerler: los embajadores!. Es nuevo este año y es un grupo de gente, encantadora por cierto y no es porque conozcamos a varios ;); que te esperan a unas horas concretas en ciertos lugares para esquiar contigo y enseñarte la estación. Es muy buena opción cuando tenéis algún niño pequeño que no podáis dejar en el jardin de nieve (no los cogen con pañal) y sólo puede esquiar uno de la pareja, o cuando vais por primera vez, no tenéis mucho tiempo (nos suele ocurrir, dejamos a los niños en el curso y las dos o tres horas hay que aprovecharlas a tope, no?).
El valle: es precioso! Y con un montón de posiblidades como: esquí de travesía, de fondo, senderismo, etc... para alternar el esquí en pista con cualquier otra actividad.
Muy recomendable la estación de esquí de fondo LLanos del Hospital, muy cerca de Cerler (nosotros aún no la conocemos pero iremos y os lo contaremos en otro post ;)
Benasque y Cerler, los dos pueblos son preciosos y la gente del valle encantadora. Desde aquí les hago un guiño a Juanjo, Laura, Silvia, Azud y otros tantos que son adoptivos del lugar, gente super hospitalaria. Amigos, volveremos!
Y para acabar: como fueron los Reyes?? Geniales!!
Y a las 18:30 llegaron a Benasque en una cabalgata sin muchas pretensiones pero que a los niños les gustó y repartieron regalos uno por uno, sin prisas y dedicando una sonrisa y una frase amable a cada uno de los niños (regalos que previamente les habíamos dado).
Ah! y coincidencias de la vida, y es que el mundo de las redes sociales tiene estas cosas, coincidimos y conocimos a una de nuestras seguidoras de Twitter (un placer @arimagic)
Aquí tenéis un blog "amigo" donde podréis encontrar noticias de Cerler y unas fotos impresionantes!
En fin, una experiencia maravillosa que seguro repetiremos el año que viene, pero antes, seguro, seguro que intentaremos volver! ¡Cerler, espéranos!
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